Hoy hace 6 años inicié esta maravillosa aventura llamada Cocina Segura y confieso que no tenía mayores expectativas, sólo quería compartir parte de los conocimientos que había obtenido durante mis años de estudios y que me habían resultado tan útiles en casa al manipular alimentos. Hoy veo con mucho orgullo como ha crecido esta comunidad de maravillosas personas que me acompañan día a día a través de las redes sociales. Mi agradecimiento pues son el alimento que me sostiene durante mis largas horas frente al computador. Un compromiso que hice parte de mi rutina y que disfruto siempre!
Lo que comenzó como un espacio de diversión para experimentar la vibra de un blog hoy es un trabajo a tiempo completo que me ha llevado por todo el país y muy pronto fuera de el, para compartir lo que he llamado "información que educa para la salud"
He crecido como profesional pero por sobre todo como ser humano, esta experiencia me ha transformado y me situación en otro nivel con mayor sensibilidad y con un compromiso social indescriptible. Darme cuenta de las necesidades de comunidades vulnerables y poder compartir conocimientos que los empiedran y les hace ser autónomos no tiene precio.
CocinaSegura se ha transformado de un blog a un espacio de acompañamiento para personas que están buscando una manera distinta de relacionarse con los alimentos, bien sea por un diagnóstico previo o por la simpleza de reconocer que los buenos hábitos construyen cimiento sólidos para su bienestar.
Aquí hablamos de inocuidad, uno de los temas huérfanos pues prácticamente no se nombra ni se comenta hasta que ocurre un incidente en casa que nos marca para siempre... soy una convencida que con educación en materia de inocuidad erradicaremos la mayor causa de fallecimientos en menores de 5 años: las Enfermedades Transmitidas por Alimentos.
También hablamos de la famosa lonchera o vianda, que más allá de la merienda escolar es la mejor excusa para conversar de nuestra responsabilidad ante nuestra salud, para mi, es la mejor herramienta para encargarnos de nuestra alimentación y la de la nuestra familiar. Hoy desde altos ejecutivos, pasando por estudiantes y personalidades de todo nivel, reconocen el valor de una comida saludable y la mejor manera es prepararla en casa con alimentos frescos que nos proporcionen todo su potencial energético y nutricional.
Con el programa Lonchera Segura pude reconocer la gran brecha en materia de educación nutricional, lo que en estos momentos nos hace presa de la angustia y víctima de dogmas y charlatanes que sólo buscan ofrecer la fórmula mágica. Somos seres humanos y nuestra evolución aún nos obliga a ingerir alimentos frescos diariamente y varias veces al día, así que cualquier cosa que ofrezca menos que eso, simplemente es un timo. Así que me he propuesto, un día a la vez, educar en material alimentaria a quien esté dispuesto a escuchar.
En este caminar he conectado con gente maravillosa, que me han permitido reconocer la bondad y la alegría de servir. Dicen que cada oveja encuentra su rebaño y yo me confieso gratamente acompañada por profesionales maravillosos que me hacen suspirar de emoción. Mi querida red Paz Adentro, el equipo de Mujer Mandala y la Fundación Celíaca de Venezuela han sido pilares fundamentales en esta evolución.
Finalmente mis hermanas de Addhara Bienestar Corporativo, son y serán por siempre mi mayor inspiración y mi motivo para continuar creciendo.
Gracias a ti por dedicar algunos minutos y leerme hasta este punto, mi compromiso es contigo y para ti. Hasta la próxima!
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